MI HIJO ES MUY BAJITO ¿HAY ALGO QUE PUEDA HACER?
CON FRECUENCIA ESCUCHAMOS A ALGÚN PADRE DECIR, REFIRIÉNDOSE A SU NIÑO, BAJO DE ESTATURA: MI HIJITO ES“…PEQUEÑO PORQUE TANTO SUS ABUELOS COMO SUS PADRES LO SON”
Este concepto, a juicio de muchos especialistas debería desecharse debido a que en la actualidad se cuenta con estudios avanzados y tratamientos que, cuando son adecuados y oportunos, pueden corregir esta situación.
Que sea pequeño es lo de menos, ya que detrás de esta condición puede esconderse una enfermedad asociada con funcionalismo renal. Ésta, atendida a temprana edad puede permitir a ese niño o niña ganar más centímetros.
Cuando un niño no gana peso ni talla, lo primero que debe investigar su pediatra son los antecedentes familiares maternos tales como problemas durante el embarazo relacionados con procesos infecciosos, hipertensión, pre-eclampsia o embarazos múltiples. En presencia de estos antecedentes, los hijos tendrán un mayor riesgo de tener bajo peso y talla y, por tanto, se debe llevar un registro adecuado de la velocidad de crecimiento del niño durante los primeros años de vida. En caso de detectarse alguna alteración en la curva de crecimiento, deben realizarse exámenes paraclínicos adecuados para determinar si existe alguna patología y referir al paciente a la especialidad correspondiente (nutriólogo,nefrólogo o endocrinólogo).
Podemos definir al síndrome de estatura baja como la presencia de una talla menor a la mínima aceptada en las gráficas poblacionales de crecimiento (también llamado percentil 3, porque debajo de este valor, se encuentra el tres por ciento de la población), o aquel niño que sin causa evidente disminuye la velocidad con que venía creciendo, colocándose en parámetros inferiores a los normales para su edad y sexo.
CLASIFICACIÓN ETIOPATOGÉNICA DE TALLA BAJA
VARIANTE DE LA NORMALIDAD (80%)
- En este grupo se incluye la baja talla familiar
TALLA BAJA PATOLÓGICA (20%)
- De inicio prenatal
- Pequeños para edad gestacional o dentro del vientre materno (patologías maternas, placentarias)
- Formando parte de algún síndrome
- De inicio postnatal
- Desnutrición
- Digestiva (principalmente celiaca o enfermedad inflamatoria intestinal).
- Respiratoria (tal como asma, fibrosis quística y otras).
- Cardiopatías congénitas.
- Renal (insuficiencia renal crónica, tubulopatías, etc).
- Inmunodeficiencias (congénitas y SIDA, principalmente).
- Hematológica/oncológica(anemias, leucosis, tumores, etc).
- Enfermedad endocrinológica, ( tal como hipotiroidismo, pubertad precoz o síndrome de Cushing)
- Causa psicosocial
Enfermedad renal
Actualmente se conoce que los problemas renales ocupan los primeros lugares en las causas de alteración de crecimiento, seguido de los trastornos endocrinos. Por eso, podemos establecer un cuestionario clave que los pediatras debemos hacer a la madre del pequeño paciente para descartar problemas renales: ¿Recibió lactancia materna? ¿Vomita con frecuencia o en los primeros meses era un lactante vomitador? ¿Es difícil lograr que coma? ¿No gana peso?¿Recibe medicamentos con frecuencia y cue les? Padece alguna enfermedad crónica?
Si algunas de estas interrogantes son positivas, se deben realizar los siguientes exámenes de laboratorio: gases venosos, electrolitos séricos incluyendo cloro, y de ser posible medirlos en orina.
Si los exámenes evidencian que el niño está perdiendo bicarbonato, es decir que su sangre tiene un ph bajo (ácido) se frenará el normal proceso de crecimiento, ya que esto altera el apetito, y por otro lado la hormona de crecimiento no actúa en medio ácido. Es por ello que en los riñones puede estar la clave del problema del niño.
Existen dos enfermedades claves del riñón que producen talla baja: acidosis tubular renal e insuficiencia renal crónica. La primera está relacionada con un desorden en el metabolismo de ácidos básicos, y por lo general está acompañada de valores de calcio y acido úrico elevados en la orina, con la consecuente formación de piedras en la vejiga y riñón.
En el caso de la insuficiencia renal crónica se sabe que el riñón pierde su capacidad de filtración y de homeostasis en forma irreversible, de igual manera no puede eliminar los productos nitrogenados como la úrea y creatinina. Ello causa una especie de intoxicación que puede generar bajo peso y talla al tiempo que produce anemia.
En cuanto a la acidosis tubular renal, el tratamiento es médico, y solemos indicar soluciones alcalinizantes de bicarbonato de sodio o citrato de potasio; si se observan valores de calcio muy elevados podemos usar diuréticos, y si los valores de acido úrico están elevados usamos el alopurinol. Este tratamiento es por tiempo prolongado, aunque cada paciente es diferente.
Los niños con diagnósticos tempranos pueden, con control médico adecuado tanto en la adolescencia como en su vida adulta, crecer y tener una vida completamente normal.
Alimentos y talla
Cuando se detecta un problema renal debe ajustarse el régimen alimenticio y consumir mucha agua y jugos naturales. No le quite la leche. Su médico le indicará cuántas raciones debe su hijo consumir (600-1200 mg) según su edad. La leche no tiene que ser descremada, puede comer quesos bajos de sal y sin colorantes, yogurt y otros lácteos.
Puede comer pollo, pavo, pescados de carne blanca, huevos, lomo de cerdo; pero las carnes rojas se deben restringir. Puede comer carbohidratos ( pan , arepa , pasas, arroz, verduras, galletas, cereales). En cuanto a los postres pueden consumir galletas dulces, flan, natillas, quesillo y helados (excepto de chocolate). Debe evitar alimentos muy salados (enlatados, embutidos, chucherías saladas) gelatinas, chocolates, refrescos, malta, bebidas energizantes y té.
Aunque existen limitaciones en la alimentación, esto no implica que el niño no asista a sus fiestas y diversiones, ya que es conveniente que interactúe con otros niños. Sus padres, de manera responsable, deben supervisar lo que el niño come y si, durante la semana mantuvo un régimen adecuado, se puede hacer una que otra excepción.
*Dra Ricnia Vizcaino Pediatra-Puericultor. Nefrólogo Pediatra