Un 25% de la población
chilena adulta presenta un Síndrome Metabólico según la encuesta
efectuada el año 2003 por el Ministerio de Salud.
¿Qué es el síndrome
metabólico?
El síndrome
metabólico, también llamado síndrome de resistencia a la insulina o
síndrome x, es un grupo de factores de riesgo, como la obesidad
abdominal, la dislipidemia (aumento de triglicéridos y colesterol en
la sangre), la intolerancia a la glucosa (alteración de la glicemia
en ayunas) y la hipertensión arterial. La presencia de 3 o más
componentes aumenta notablemente el riesgo de una persona de
desarrollar enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2. Esta
patología era considerada del adulto pero hoy en día se sabe que
este síndrome está tomando mucho auge en la edad pediátrica. Con el
paso del tiempo se ha observado un aumento de obesidad en nuestros
niños, debido al entorno "obesogeno" (Dietas insanas, vida
sedentaria y el modernismo).
¿A qué se debe esta
patología típica de adultos ahora se encuentre en niños?
Influyen varios
factores entre los que tenemos: Factores genéticos y ambientales.
Entre los factores genéticos tenemos:
La obesidad
(predisposición de algunas personas a almacenar exceso de tejido
adiposo sobre todo a nivel abdominal). Se han observado que niños
que padecen de este síndrome pudieran tener algún familiar en las
mismas condiciones.
En lo que respecta a
factores ambientales tenemos:
La dieta, que
es muy influyente. Hoy en día tenemos exceso de consumo de
carbohidratos, y grasas, de igual modo el sedentarismo también
ejerce una gran influencia en este problema, pues nuestros niños
ahora pasan muchas horas en las salas de internet, disminuyendo así
las actividades físicas.
¿Cuales son las
manifestaciones clínicas del síndrome metabólico en niños y
adolescentes?
Los niños con síndrome
metabólico son por lo general obesos, aunque no es excluyente ya que
se ha observado en niños delgados. Por lo tanto debemos estar
atentos con los pacientes de alto riesgo, entre ellos aquellos con
antecedentes familiares de diabetes, hipertensión arterial,
dislipidemia, antecedentes personales (del niño) como son
antecedentes perinatales (hoy se habla de síndrome metabólico
adquirido in útero) retardo de crecimiento intrauterino, recién
nacido grande para la edad gestacional, hijos de madre diabética,
pubertad precoz, hígado graso.
¿Qué medidas
preventivas se pueden tomar y que tratamiento se sugiere?
Los pediatras debemos
tener presente el síndrome metabólico en niños y adolescentes, ya
que hoy día constituye un problema de salud pública, en el sentido,
de que como ya se dijo en esta entrevista, se han observado
últimamente una falta de incidencia de patología del adulto en
nuestros niños e incluso de adultos jóvenes (por ejemplo infartos en
personas de 30 a 40 años) por lo que debemos:
-
Conocer los
pacientes de alto riesgo (vigilar el peso, talla, circunferencia
abdominal, e índice de masa corporal, este último nos orienta
sobre el grado de obesidad de nuestros niños).
-
Interrogar sobre
los hábitos alimenticios, en especial sobre el consumo de
"comidas rápidas" como las hamburguesas, perros calientes, y
pizzas.
-
Y estimular un
cambio en el estilo de vida, promoviendo actividad física en
nuestros jóvenes sobre todo en prácticas de deportes.
¿Qué beneficios se
podrán obtener de tomar estas medidas preventivas?
Con todo esto
estaremos reduciendo el número de muertes y discapacidad en la edad
adulta, ayudando a minimizar la carga mundial de enfermedad
cardiovascular y diabetes tipo 2, (Que es la diabetes del adulto).
Debemos concientizar los problemas asociados a la obesidad y la
probabilidad de progreso hacia el síndrome metabólico en niños y
adolescentes, que si bien es una patología endocrinológica está en
manos del pediatra diagnosticar, prevenir, tratar y referir
oportunamente.
La prevención es tarea
de todos, no solo de nosotros los pediatras; los padres (e el
hogar), las escuelas (a nivel de las cantinas) y la comunidad,
juegan un papel muy importante en vigilar este tipo de patologías en
nuestros niños y adolescentes, ¿como lo lograremos?... Mediante una
alimentación sana y balanceada. Hoy en día se esta estimulando a las
cadenas de comida rápida, a que ofrezcan lo que se conoce como Slow
food (comida lenta): ensaladas, yogurt, jugos naturales, etc. y no
solo pizza, perros calientes y hamburguesas. Es de vital importancia
también ayudar a evitar el sedentarismo promoviendo actividades
físicas.
De igual modo los
padres deben mostrar diligencia en tener un adecuado control
pediátrico con especialistas calificados como la Doctora Elsa
Arismendi Acosta, que con mucho gusto le ayudara a evitar riesgos
presentes y futuros en la salud de su hijo.
Se habla que una
persona padece de Síndrome X o Síndrome Metabólico, como se le
conoce más comúnmente, cuando presentan en su cuerpo un conjunto de
patologías, que unidas, pueden causar más daño que si se presentaran
en forma individual. Estas patologías son: diabetes, alteración del
perfil lipídico (dislipidemia), presión arterial elevada,
insulinoresistencia y a la vez, obesidad (índice de masa corporal
(IMC) alto), que por si sola ya es un componente de alteración que
puede ir asociado a los otros elementos, pero como un elemento
adicional y presente en casi todos los pacientes de este tipo. Con
tres de los factores anteriormente descrito, ya se puede
diagnosticar el síndrome.
Para comenzar y dar la
verdadera importancia del problema citare algunos títulos en el
mundo
-
Médicos del todo
el mundo están preocupados por el alarmante número de personas
que padecen síndrome metabólico.
-
Esta patología
aumenta los riesgos de diabetes, ataques cardíacos o accidentes
vasculares.
-
Tener síndrome
metabólico o síndrome X. Un concepto poco conocido, pero que
sólo en Chile afecta a más de tres millones de personas.
-
Este es un
conjunto de alteraciones que puede tener una persona, que son
bastante frecuentes, entre ellos la hipertensión arterial, los
trastornos del colesterol, la diabetes tipo dos y la obesidad
abdominal.
-
Se calcula que un
cuarto de la población adulta tiene síndrome metabólico y, por
tanto, tres veces más posibilidades de sufrir un ataque cardíaco
o derrame cerebral.
-
Los expertos
coinciden en la importancia de detectar y tratar a tiempo los
factores que determinan el síndrome metabólico, convertido
actualmente en una verdadera pandemia.
-
La única receta
mágica que hay, es conseguir que la gente cambie su dieta y que
haga mas ejercicio, porque sabemos que si ellos pierden algo de
peso, si ellos comienzan a caminar media hora al día, los
riesgos bajan".
-
Aunque el esfuerzo
debe estar centrado en mejorar los hábitos alimenticios y en
terminar con el sedentarismo, las nuevas terapias incorporan
medicamentos para ayudar a quienes tienen problemas con sus
índices metabólicos.
-
El tratamiento
debería contemplar una terapia combinada de estatinas y ácido
nicotínico, para bajar el colesterol malo y subir el bueno,
medicamentos para controlar la presión arterial", aclaró James
Shepherd, de la Universidad de Glasgow, en Escocia.
"Y si es posible,
medicamentos para reducir la obesidad. Todas ellas deberían ser
usadas en combinación para reducir los riesgos del síndrome
metabólico".
Aparentemente complejo
de entender, algo tan frecuente, tan peligroso y ya el hombre suena
raro.
Partiendo por saber
que pasa con los hidratos de carbono, los azucares y por lo tanto el
control hormonal de estos podemos comenzar las primeras etapas de
comprender el Síndrome Metabólico.
¿Qué es la
insulina?
La insulina en primer
lugar es una hormona liberada por las células ubicadas en el
páncreas y cuya función es promover la entrada de glucosa en las
células para su utilización como fuente de energía.
¿Que pasa con los
chocolates?
Cuando ingerimos
alimentos y especialmente alimentos endulzados sube la glucosa en la
sangre (glicemia), generándose entonces una respuesta del páncreas
que libera la insulina para utilizar esta glucosa.
De esta manera, a las
dos horas post ingesta se vuelve a los valores normales de glicemia.
La insulina controla
de este modo el metabolismo de los hidratos de carbono, a mas azúcar
mas insulina.
¿Qué otras
funciones cumple la insulina?
También tiene otra
función: aumenta la formación de triglicéridos (grasas) y aumenta la
formación de proteínas.
¿Qué es la
Resistencia a Insulina?
Es la disminución de
la sensibilidad de las células a la acción de la insulina. Cuando
existe resistencia a insulina el páncreas debe liberar más hormona
para utilizar la glucosa y lograr el equilibrio de la glicemia. Es
decir, si comparamos dos personas, una sana y otra con resistencia a
la insulina, ante una cantidad semejante de ingesta de alimentos y
azúcares, la persona con resistencia a insulina debe secretar una
mayor cantidad de hormona para lograr controlar el nivel de azúcar
(glicemia) en la sangre, es decir presenta una hiperinsulinemia.
¿Cuál es la causa
de la Resistencia a la Insulina?
Existen factores
genéticos externos como son la obesidad y el sedentarismo.
El gran problema es
que alrededor de un 50% de los obesos presenta resistencia a
insulina.
¿Cuándo se
diagnostica el Síndrome Metabólico o de Resistencia a Insulina?
En el Síndrome
Metabólico se encuentran alteradas numerosas funciones metabólicas
del organismo, las cuales se relacionan entre sí, siendo factores de
riesgo unas de otras. Por ello, el manejo dietético debe ser
integral y planificarse en forma individual.
El Síndrome Metabólico
o de Resistencia a Insulina se diagnostica cuando tres o más de los
siguientes factores de riesgo que se mencionan a continuación están
presentes.
Factor de
Riesgo |
Nivel
Definido |
OBESIDAD
ABDOMINAL |
Circunferencia de Cintura |
Hombres |
Mayor de
102 cm. |
Mujeres
|
Mayor de
88 cm. |
TRIGLICÉRIDOS |
Mayor o
igual a 150 mg/dL |
COLESTEROL
HDL |
|
Hombres |
Menor a 40
mg/dL |
Mujeres |
Menor a 50
mg/dL |
PRESIÓN
SANGUÍNEA |
Sistólica
Mayor o igual 130 mmHg
Diastólica Mayor a 85 mm Hg |
GLUCOSA EN
AYUNA |
Mayor o
igual a 110 mg/dL |
¿Qué
complicaciones se asocian a la obesidad abdominal?
La obesidad se define como un exceso de peso en base a aumento
de la grasa corporal, con un Índice de Masa Corporal Superior a
30. en caso de niños existen tablas de referencia .La obesidad
abdominal corresponde a una disposición de la grasa en el
abdomen, que da una silueta que semeja una manzana, es decir, si
medimos la cintura de estas personas encontramos valores sobre
los 80 centímetros en mujeres y 102 en hombres.
¿Por qué la
obesidad en especial la obesidad abdominal es uno de los
factores de riesgo para el desarrollo del Síndrome Metabólico o
de Resistencia a Insulina?
Se ha encontrado en diversos estudios que el aumento de células
grasas en el cuerpo generaría o contribuiría a la resistencia a
la insulina. Además, cuando existe una gran cantidad de grasa
corporal, especialmente en el abdomen y específicamente en la
zona de las vísceras, se produce una mayor flujo o salida de
grasas libres hacia hígado debido a la cercanía anatómica. Esta
mayor cantidad de grasas libres determina que el hígado forme
más glucosa, triglicéridos y un tipo de colesterol muy pequeño
(colesterol VLDL), con disminución en la formación del
colesterol bueno (colesterol HDL) por una mayor actividad
hepática.
De esta manera, se configura parte del Síndrome Metabólico, que
genera hipertrigliceridemia (triglicéridos sobre 150 mg/dL) y
baja del colesterol bueno o HDL.
Colesterol poco conocido pero muy dañino
Las partículas de colesterol muy pequeñas (VLDL) tienen una
implicancia directa en el desarrollo de las placas de ateromas
en las arterias, estableciéndose así la enfermedad
cardiovascular.
¿Por qué el Síndrome Metabólico o de Resistencia Insulina se
asocia a hipertensión arterial?
La obesidad por sí misma es factor de riesgo para el desarrollo
de la hipertensión arterial, así como también lo es la
hiperinsulinemia. La obesidad favorecería la hiperinsulinemia y
a su vez el exceso de insulina aumentaría la retención de
líquidos y sodio (sal), favoreciendo además la constricción de
las arterias. De esta manera, se agrega otro factor de riesgo
para las enfermedades cardiovasculares.
¿Puede
desarrollarse una diabetes en las personas con insulino
resistencia?
Sí, las personas que no tratan en forma precoz la
insulinoresistencia tienen un alto riesgo de desarrollar con el
tiempo una diabetes mellitus tipo 2. La hiperinsulinemia
compensadora precede en 10 años el desarrollo de esta
enfermedad.

¿Qué otras enfermedades pueden estar presentes en el Síndrome
Metabólico?
El hígado graso o esteatosis hepática producto de la alteración
del metabolismo de las grasas se observa especialmente en
pacientes obesos que presentan este síndrome, también se puede
encontrar aumento del ácido úrico o hiperuricemia.
¿Pueden los
niños presentar un Síndrome Metabólico?
En la actualidad se observa que alrededor de la mitad de los
niños con obesidad presenta hiperinsulinemia e
hipercolesterolemia, sin llegar a constituir un Síndrome
Metabólico. Sin embargo, cuando ellos no son tratados y crecen
manteniendo o aumentando su obesidad, un porcentaje importante
llega a presentar un Síndrome Metabólico en la adolescencia.
Estos adolescentes adelante tienen enfermedades cardiovasculares
en etapas tempranas de la vida por lo que deben ser tratados
integralmente una vez hecho el diagnóstico.
¿Cuáles son los riesgos de tener un Síndrome Metabólico?
Los riesgos son presentar enfermedades del corazón,
especialmente de cardiopatías isquémicas, como el infarto
cardíaco. Se recomienda a las personas que tienen obesidad con
alguna de estas alteraciones consultar a un médico especialista.
Una vez diagnosticado el Síndrome Metabólico se debe seguir
estrictamente las indicaciones médicas para poder disminuir el
nivel de insulina, la obesidad y todos los riesgos en salud
asociados, especialmente los riesgos coronarios.
¿Existen otras patologías que presenten Resistencia a
Insulina?
Si, el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP) que afecta a un 10%
de las mujeres en edad fértil se asocia a resistencia a
insulina. Este síndrome se caracteriza por alteraciones
menstruales, obesidad, hirsutismo o aumento del vello corporal,
acné e infertilidad.
¿Cuáles son las indicaciones fundamentales para poder controlar
el Síndrome de Resistencia a Insulina?
BAJAR DE PESO: La reducción de al menos un 10% del peso
disminuye la hiperinsulinemia y la resistencia a la insulina.
Reduzca el tamaño de las porciones de alimentos, consuma más
ensaladas y frutas y evite comer entre comidas.
AUMENTAR LA ACTIVIDAD FÍSICA: Cuando se practica ejercicio
físico aumenta la sensibilidad de las células a la insulina y
también aumenta el consumo de glucosa por las células del
músculo, es decir, se utiliza más glucosa como fuente de energía
para el movimiento. Por lo tanto al existir menos glucosa
circulante el páncreas disminuye la secreción de insulina.
Además, la actividad física aumenta el gasto de calorías,
contribuyendo de este modo a la baja de peso. Camine diariamente
entre 30 a 45 minutos, efectúe una marcha vigorosa, salga en
bicicleta o practique la jardinería.
MEDICAMENTOS: Existen distintos medicamentos que ayudan a
mejorar la sensibilidad a la insulina, a aumentar la secreción
de insulina por el páncreas o a disminuir la formación de
glucosa en el hígado. También existen diversos medicamentos para
manejar la hipercolesterolemia y el aumento de triglicéridos,
así como de las otras complicaciones. Estos serán indicados de
acuerdo a la situación particular de cada persona por el médico
tratante.
ALCOHOL: Se recomienda suspender el consumo de alcohol ya que
favorece la constricción de las arterias, estimula el sistema
nervioso y aumenta algunas hormonas que favorecen la resistencia
a la insulina. Beba agua entre, durante y después de las
comidas.
TABACO: El consumo de tabaco aumenta significativamente el
riesgo de enfermedad cardiovascular entre otros riesgos como:
cáncer pulmonar, bronquitis obstructiva, etc. Se recomienda
eliminar definitivamente el consumo y además exija ser fumador
pasivo, es decir, evite aspirar el humo producido por otros
fumadores. Deje el cigarrillo
CAMBIO DE ALIMENTACIÓN
¿Cuáles son las recomendaciones alimentarias?.
En el caso, por ejemplo, de una persona que tiene alteraciones
en los niveles de glicemia, un inadecuado manejo de los lípidos
y además, una presión arterial elevada, estamos en presencia de
un sujeto que tiene un serio riesgo vital, ya que producto de la
hipertensión, se le puede producir una ruptura en algún vaso
causándole una trombosis, si además de eso tiene la complicación
de la obesidad, que de por si trae consigo problemas asociados
al aumento de los lípidos que favorecen al deposito de grasa,
todo se complica mucho más, ya que la grasa no sólo queda
"estacionada" en determinados lugares, sino que empieza a
depositarse a nivel muscular, del hígado o circula en el
torrente circulatorio, por ejemplo.
Contrario a lo que piensa, ésta no es una enfermedad que sólo
afecta a las personas con sobrepeso u obesidad, sino que a todo
el mundo. Lo que generalmente se da es que la obesidad está
asociada a cualquiera de los componentes anteriormente
descritos, pero no siempre está presente.
Esta patología es muy común en nuestro país. Poco a poco se
están alcanzando los alarmantes niveles de países como Estados
Unidos, donde alrededor del 25% de la población mayor de 20 años
padece de Síndrome Metabólico. En Chile, bastaría con tomar al
segmento de personas con sobrepeso u obesos, que tienen alterado
sus perfiles lipídicos y sus niveles de glucosa, para cifrar en
torno al 20% por ciento la cantidad de compatriotas en edad
adulta que padecen este síndrome, en otras palabras, estamos
teniendo los mismos problemas de los países desarrollados, pero
lamentablemente en un sistema en desarrollo.
Edad cada vez mas joven:
Respecto de la edad de los candidatos a padecer de Síndrome
Metabólico, ésta ha ido bajando de forma dramática. Si antes se
hablaba de pacientes que bordeaban los 50 años, ahora el grupo
de riesgo está situado en torno a los 35 años, ello porque desde
etapas muy tempranas de la vida, las personas tienen malos
hábitos de alimentación y escaso ejercicio físico.
Todos estos procesos requieren de años para que se manifiesten.
Antiguamente, para que se pudiera desarrollar la mayoría de
estas patologías debían pasar alrededor de 25 años o más, por lo
tanto no aparecían en el niño o el adolescente, pero, en este
momento, se está encontrando a edades tempranas lo que se
denomina, diabetes tipo 2 o "diabetes del adulto". Esto ocurre,
en parte, por que los pequeños desde que están en el vientre
materno están recibiendo de sus madres con sobrepeso u obesas,
la predisposición para la enfermedad (altos niveles de glucosa,
por ejemplo), entonces por eso tenemos pacientes de 10 o 12 años
con diabetes tipo 2. No es que las cosas estén cambiando por que
si, sino que nosotros estamos exponiendo al niño desde antes que
nazca a una situación que antes tomaba más tiempo y se expresaba
con menor fuerza.
Alarma domestica
No hay que esperar a ser obeso para ponerse a bajar de peso.
Cuando uno ve que el cinturón no le está quedando es el momento
para decir: "hasta acá llego", pero, lo que ocurre, es que la
gente se compra otra camisa, otros pantalones u otro cinturón y
no se preocupa de su salud. Los sujetos saben que es dañino
comer grasas saturadas en exceso, pero igualmente lo siguen
haciendo, entonces, ¿porque no se privan? Por que la grasa está
ligada al sabor y por ende al placer; una carne con grasa es más
rica que una desgrasada, igualmente que la leche. Como la grasa
está asociada al sabor, nadie quiere perder sabor, por ende,
nadie quiere perder el placer de disfrutar los alimentos.
Tratamiento: cambio de hábitos. si o si.
La forma de tratar este síndrome es, en primer lugar, es
cambiando el estilo de vida de las personas. La obesidad no
aparece de un día para otro, las alteraciones del perfil
lipídico tampoco y la diabetes tipo 2 mucho menos. Las personas
van teniendo señales, como en el caso de esta última enfermedad,
que les van advirtiendo. Los individuos sienten mucha sed,
aumento de la micción, decaimiento, todo esto hace consulten a
su médico y se les detecte la glicemia elevada, primer paso de
la enfermedad. Se les advierte de su condición, se les asigna
una dieta que luego no cumplen y se inicia así el proceso
irreversible.
Todos estos problemas son evitables y a la vez cuando aparecen
son todos problemas tratables. Un sujeto que se toma
correctamente su antihipertensivo puede mantener la presión "a
raya" durante todo el tiempo que sea necesario, lo mismo alguien
que tiene su perfil lipídico alterado, siguiendo una dieta
adecuada, tomando algún fármaco y principalmente haciendo
ejercicios, esa persona puede vivir sin problemas.
Si usted es una persona con peso normal, y tiene tres de las
patologías descritas anteriormente (diabetes, alteración del
perfil lipídico (dislipidemia), índice de masa corporal (IMC)
alto, presión arterial elevada, insulinoresistencia o
intolerancia a la glucosa, visite a su médico a la brevedad.
Ahora, si tiene sobrepeso o es obeso, preocúpese aún más, su
calidad de vida y su sobrevida están en serio riesgo
Fuente: Nutricion
y salud
Meneguello Pediatria.
Sociedad Chilena de Nutrición
Excelente articulo
tomado del
Dr. Pedro
Barreda.www.pediatrialdia.cl
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